Lo bueno de haberse perdido muchas veces es que: ya no te da miedo perderte.
Lo bueno de que te hayan fallado muchas veces es que: aprendes a no hacer un mundo de ello.
Lo bueno de saber que nada ni nadie es para siempre: es saber precisamente eso, que nada ni nadie es imprescindible en tu vida.
Lo bueno de saber quién eres es que: nadie va a venir a cambiarte; antes cambian ell@s en el intento.
Lo bueno de saber dónde quieres estar y hacia dónde quieres ir es que: nadie va a hacerte tropezar con nada ni en nada.
Lo bueno de saber lo que vales es que: le quitas al resto la oportunidad de ponerte precio.
Lo bueno de que sepan y tú sepas todo esto de ti incluyendo todo lo que te quieres y te valoras: es que nadie va a venir a nada que tú no quieras.