
Mi corazón no reprocha tu inocencia
Pues la ama con locura apasionada
Ya las letras van formando la cadencia
Tiernos versos dedicados a mi amada.
El salón con orquídeas adornado
Suena un tango melodioso y envolvente
En una mesa dos amantes se han mirado
Ignorando al resto de la gente.
Melodías en el aire “son violines”
Van danzando sobre todas las cabezas
Las escuchan hechizados bailarines
Que sus cuerpos mueven con destreza.
En la mesa los amantes han brindado
Por un cielo donde velan las estrellas
Nunca falta cuando el amor se ha dado
Quien se vea reflejado en una de ellas.
Caballeroso él la toma de la mano
Manifiesta con palabras a su amada
Esta noche apenas ha comenzado
¿Bailas tango o te canto una balada?
.