Quiero ser la luna de tus noches para acompañar y apaciguar tu soledad

Desde las noches estrelladas, hasta aquellas en que las nubes acaparan todo el vacío.

Quiero ser la luna que acompañe la armoniosa melodía de tu respiración contra tu almohada,

Para guardar con recelo hasta el más mínimo detalle acerca de ti,

Porque todo aquello que esté relacionado a ti, deseo que también este relacionado a mí.

Guardo con fervor mi deseo de ser luna de tus noches,

Para que tu mirada se pierda en mí cuando tu mente esté divagando de pensamiento en pensamiento,

Agobiado tal vez de tanto altibajos que trae el diario vivir consigo,  o feliz por casi tocarla gloria con tus propias manos tras un día lleno de éxitos.

No te mentiré, también deseo ser la luna de tu noches por una razón más,

Y es que anhelo ver tu rostro cuando, en la intimidad que brinda la oscuridad,

Te llenas de éxtasis al vivir una experiencia fortuita, quizás con tu amada, o quizás a escondidas.

Quiero ser la luna de tus noches, porque sé que en tus brazos no puedo estar,

Y por mi ausencia, querido, espero que me perdones, a pesar de no saber si deseas o no mi compañía;

Te escribo estas líneas para que me recuerdes, aunque sinceramente dudo que llegues a leerlas.

Me queda la satisfacción de saber que, imaginariamente, te he hecho saber:

Sin importar lo que pase, siempre anhelaré ser la luna de tus noches.

-Señorita Luján