
Por favor, entra o regístrate para responder a esta publicación.

Hola.
Sí, hola, cuanto tiempo sin decir esa palabra ¿Eh? Bueno, no nos la decíamos.
¿Por qué? Todavía no lo sé la verdad, y en el fondo es muy triste.
No somos buenas amigas, lo sabéis, ¿no? Nos separamos todas, nos distanciamos y no hemos tenido los ovarios de hablar de ello. Y suena muy mal, pero yo no voy a hablarlo cuando he sido la tonta que se ha quedado tirada en el suelo, en una esquina, llorando porque todo se estaba acabando.
Acepté el cambio, porque vi que el destino quiso eso.
Pero lo que no sabía era que el karma me iba a dar otro aviso.
Hola, si, estoy harta, harta de estar rota y llorar por otros, estoy muy harta y vais y vosotras también lo hacéis, porque no visteis lo destrozada que estaba, no visteis la sangre que poco a poco iba derramando por las heridas de cada caída que me pegaba.
O por lo menos no os dio la gana de daros cuenta.
Conocéis mundo, ¡Claro! Y lo respeto muchísimo, porque conocemos gente y el ser humano es siempre atraído por lo nuevo, no por lo de siempre.
Pero he visto que ya soy un recuerdo.
Y me jode, porque estoy pasando página, radicalmente, pero lo estoy haciendo .
¡Que le joda al pasado! Ya estoy en 2020 y eso significa empezar de 0.
Y no quiero empezar con cosas que me recuerden a dolor porque, una cosa es meter la pata pero otra es ver cómo ninguna se acerca, te apoya y te ayuda.
No lo sé, paso de estar rota, porque he estado 3 meses en cenizas con ellas presentes del espectáculo y, he decidido que ya es hora de empezar a ser un ave fénix, ¿No crees?
Puede que me esté equivocado, y lo siento pero no lo siento.
Os voy a echar de menos, os voy a echar a horrores de menos, pero la vida sigue, el karma me ha abierto los ojos y ya es hora de que os vea cómo compañeras y conocidas.
Porque vosotras, no sois lo que la RAE define como amigos.