Las ruinas de Machu Picchu, ubicadas en los Andes peruanos a unos 2,430 metros sobre el nivel del mar, son un sitio arqueológico de la civilización inca. Construidas en el siglo XV durante el reinado del emperador Pachacútec, Machu Picchu fue un centro político, religioso y administrativo, y es uno de los mayores legados culturales de esta civilización. El complejo está dividido en dos áreas principales: la zona urbana y la agrícola. En la parte urbana se encuentran templos, plazas y viviendas, destacando el Templo del Sol, el Templo de las Tres Ventanas y la Intihuatana, una piedra ritual vinculada al calendario solar. La zona agrícola incluye terrazas escalonadas diseñadas para la producción de alimentos y el control de la erosión. Su ubicación estratégica, en la cima de una montaña rodeada por el río Urubamba, muestra un profundo conocimiento de ingeniería y armonía con la naturaleza. Redescubierta en 1911 por el explorador Hiram Bingham, Machu Picchu es considerada una de las nuevas Siete Maravillas del Mundo y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1983. Hoy en día, es un símbolo de la grandeza inca y un destino turístico de renombre mundial que refleja la riqueza cultural y arquitectónica de esta civilización.